Hoy te voy a hablar de por qué entramos en depresión.
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Hoy en día estamos encontrando una epidemia de depresión porque no aprendemos a ir en dirección a lo que deseamos, dejamos que la vida decida por nosotros y nos conformamos con algo que no queremos, creyendo que no podemos cambiarlo.
Todo tiene un lado bueno y un lado malo
La situación en que estamos tiene un lado bueno y un lado malo, nuestro objetivo tiene un lado bueno y un lado malo. Si esperamos que la vida decida por nosotros, nos sentimos horrible porque el lado malo viene y no tuvimos la oportunidad de elegir. Esto es muy frustrarte y genera la sensación de que la vida es muy difícil.
Si la persona no ve sentido a su vida es porque realmente no lo tiene, hay que armarse de coraje y apoyo, darle la vuelta entera y empezar todo de nuevo en algo que sí tenga sentido para ti. No es fácil, pero el resultado merece la pena. Tampoco es rápido. Hay un proceso de «desintoxicación» en el camino.
Un poquito de mi historia
En el año 2000 yo estaba con una depresión profunda, tomando ansiolíticos y con una vida que no tenía ningún sentido.
Estaba construyendo una vida que no era mía, era de las personas que me decían lo que era mejor para mí. Me sentía completamente perdida.
No sabía lo que quería ni tampoco lo que me gustaba. En este momento estaba en mi segunda carrera, estudiaba ingeniería de construcción para seguir el negocio de mi padre. Pero odiaba todas las asignaturas que tenían que ver con el negocio.
El último año que asistí, hice una asignatura que tenía muchos experimentos que me encantaban. En esta época, yo ya era licenciada en química. Entonces me di cuenta de que lo que me gustaba era estar en un laboratorio, pero aún pensaba que mi destino era trabajar con mi padre.
El cambio
Con la ayuda de un profesional, me llené de valor y cancelé mi matrícula en la carrera de ingeniería. Fui a una de las mejores universidades de São Paulo donde conocía algunos investigadores y empecé mi trabajo como investigadora. En una semana mi vida dio una vuelta completa y volvió a tener sentido.
Empecé mi máster en energías alternativas (pilas de combustible) y lo terminé con la ayuda de mi psicólogo Nuno Luis Dutra Amaral (ipec). Fue un periodo de mucho aprendizaje sobre mi misma. Enfrenté a muchas inseguridades y me fui cambiando poco a poco.
Luego hice mi doctorado con una estancia en España dónde conocí a mi marido. Terminé el doctorado. Me mudé para España y continué trabajando con investigación en pilas de combustible.
Con todo este camino se quedó claro que podía transformar mi vida de la manera que quisiera
Lo he experimentado y comprobado una y otra vez que es posible.
Aprender a cambiar mi vida me hizo querer ayudar a las personas a hacer lo mismo. En el laboratorio, yo ponía un experimento para hacerse y luego iba a hablar con la gente para identificar cambios pendientes. Este fue el inicio del camino que me llevó a encontrar mi mayor pasión que es ayudar a que las personas lleguen a donde realmente desean.
Decidí que quería trabajar con esto y conocía a Gloria Méndez en un curso presencial en la UNED. Me formé Experta en Cambio (Life Management Coaching). Y, en 2013, dejé la investigación y empecé a trabajar con esto.
Mi vena de investigadora me hizo aprender otros métodos que incorporo al proceso que utilizo para que las personas lleguen dónde quieren, o sea, logren sus objetivos y se sientan realizadas.
Si tienes depresión, busca ayuda y apoyo para encontrar lo que deseas y cambia tu vida para que vuelva a tener sentido
Cuándo nos realineamos con nosotros mismos, nuestra vida se transforma en algo emocionante que nos motiva y nos hace sentir que merece ser vivida.
Un abrazo,
Thais
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